Para ofrecer las mejores experiencias, utilizamos tecnologías como las cookies para almacenar y/o acceder a la información del dispositivo. El consentimiento de estas tecnologías nos permitirá procesar datos como el comportamiento de navegación o las identificaciones únicas en este sitio. No consentir o retirar el consentimiento, puede afectar negativamente a ciertas características y funciones.
El almacenamiento o acceso técnico es estrictamente necesario para el propósito legítimo de permitir el uso de un servicio específico explícitamente solicitado por el abonado o usuario, o con el único propósito de llevar a cabo la transmisión de una comunicación a través de una red de comunicaciones electrónicas.
El almacenamiento o acceso técnico es necesario para la finalidad legítima de almacenar preferencias no solicitadas por el abonado o usuario.
El almacenamiento o acceso técnico que es utilizado exclusivamente con fines estadísticos.
El almacenamiento o acceso técnico que se utiliza exclusivamente con fines estadísticos anónimos. Sin un requerimiento, el cumplimiento voluntario por parte de tu Proveedor de servicios de Internet, o los registros adicionales de un tercero, la información almacenada o recuperada sólo para este propósito no se puede utilizar para identificarte.
El almacenamiento o acceso técnico es necesario para crear perfiles de usuario para enviar publicidad, o para rastrear al usuario en una web o en varias web con fines de marketing similares.
Monasterio Cisterciense de El Salvador. Benavente (Zamora)
Monasterio Cisterciense de El Salvador. Benavente (Zamora)
El monasterio cisterciense de El Salvador de Benavente se fundó el 12 de diciembre de 1181, en Santa Colomba, pequeña localidad zamorana, situada a cinco kilómetros de Benavente. Se cree, mayoritariamente, que las primeras monjas que lo ocuparon procedían del monasterio de Santa María de Gradefes, situado en la Provincia de León y que fue fundado el año de 1168.
El monasterio ha conocido dos traslados. El 23 de abril de 1581 las hermanas se trasladan a la Villa de Benavente, dado que el Concilio de Trento invitó a los monasterios a trasladarse dentro de las villas o ciudades para mayor protección y, también, por la situación comprometida del edificio que amenazaba ruina. Otros cuatro siglos más tarde, el 30 de Noviembre de 1976, se realiza un nuevo traslado, a la situación actual, buscando un entorno más favorable a la vida de clausura y para habitar una casa mejor acondicionada para las necesidades vitales.